martes, 9 de septiembre de 2008

Interludio


Déjame sentirte

Déjame tocarte

Deja que tu aroma

Me llene,Me calme.

Me colmen tus ojos

Me rocen tus labios

Me sienta tu aliento

Me mezan tus brazos

Deja que descanse

Sobre tu piel tersa

Deja que me duerma

Mientras me contemplas

Deja que mis sueños

Sean el reflejo

De la íntima escena

Del bello momento

De besos, suspiros

Y de ahogados ecos.

Y cuando desees

Sentirme de nuevo

Deja que tan solo

El susurro quedo

De tu voz, tu boca

Tus manos, tu cuerpo

Despierten mi alma

Y enciendan mi pecho

2 comentarios:

noctambulus dijo...

Como un imán se atraen los cuerpos, al oír sus latidos buscan la unión del tu y el yo, sin remedio siguen el impulso de sus movimientos, danzan en caricias para mitigar su fuego,para oír la voz de un amor que les habla en silencio... besos con fantasía añadida

Néctar dijo...

Me ha encantado tu poesía, la profundidad de tus sentimientos, la intensidad de tus palabras, la esencia de tus versos.